ABSTRACT
El carcinoma de tiroides es el tumor maligno más frecuente en la patología endocrina. En nuestro medio tiene una incidencia de 1,87 casos por cada cien mil habitantes. La tiroglobulina es una iodogliproteína que se utiliza en el seguimiento de pacientes portadores de cáncer tiroideo diferenciado. El rastreo tiroideo con iodo 131 es un procedimiento con demostrada utilidad en la detección de metástasis funcionantes causadas por esta patología. Se reporta la concordancia entre estos dos métodos en 22 pacientes derivados al Centro de Medicina Nuclear y procedentes del Departamento de Cabeza y Cuello del INEN, los cuales habían sido sometidos a tiroidectomía total y recibido dosis ablativa de iodo 131; posteriormente fueran sometidos a rastreo corporal total y determinada la concentración de tiroglobulina sérica. Catorce de los pacientes fueron mujeres y un número igual fueron calificados como portadores de cáncer de alto riesgo. Se concluye que para la población estudiada existió excelente correlación entre los dos métodos y que para el futuro se utilizará a 6,5 ng/ml como punto de corte en la determinación de tiroglobulina sérica